martes, 7 de julio de 2015

Distinción entre Nombre del alimento y las Marcas


La familia del consumo responsable se fue a hacer mercado, el hijo pidió un chocoramo, la abuela una maizena, mientras el padre pensó en comprar un frutiño y la madre un regeneris.

Es este el fenómeno que más ocurre dentro de nuestros núcleos familiares al momento de decidirnos por algún producto alimenticio, donde solo nos referimos a la marca del alimento desconociendo totalmente qué es lo que comemos.

En gran medida existen varias justificaciones por las cuales se concibe a la marca como un factor importante a la hora de elegir un producto, una de estas la calidad que por tradición siempre ha cumplido con las expectativas del consumidor y otra posible sería la novedad de los productos en el mercado, donde se siguen tendencias a nivel mundial.

A pesar de tener claro el por qué los consumidores escogen refiriéndose solo a la marca, es necesario entender que según la resolución 5109 del 2005, todos los productos alimenticios deben declarar en la etiqueta el nombre del alimento, por ejemplo el chocoramo es: ponqué con cobertura de chocolate, el frutiño es: mezcla en polvo para preparar bebida con pulpa de fruta deshidratada y sabor a Lulo; y así en cada uno de los productos alimenticios que se encuentren en el mercado.

Con el objetivo de reconocer no solo lo que comemos, sino el poder evaluar entre varios productos alimenticios de naturaleza similar, la Escuela de Consumo Responsable te invita a incorporar dentro de tu proceso de selección la lectura del nombre del alimento en las etiquetas de los productos que consumas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario